Adios Abuela.

Es incrible la cantidad de recuerdos que vienen ami mente, de aquellos días que vivi cuando era niño al lado de mi abuela, una mujer que en aquel entonces, era como un roble, de esos frondosos, yo la veia jalar para todos lados muebles, cubetas, pavos, gallinas, en fin, nunca acabaría de contarles. Sin embargo, el día de ayer, fui a despedirme de mi abuelita Rosario, era algo que en realidad me negaba a realizar.

Despues de llegar y saludar a la familia, que por cierto por desgracia siempre se reunen todos en eventos tan "especiales" como el dia de ayer, tenía primos y sobrinos que no veía creo desde hace 5 o 10 años, la verdad no recuerdo desde cuando, pero pasaba a segundo término lo que me comentaban, solo los escuchaba hablar, no les puse atención; llegaba el momento de saludar a la abuela, iba con mis dos mounstros, mis adoradas e incondicionales hijas, que a donde voy siempre andas atras de mi, pero el dia de ayer, sin saber que pasaba, tampoco querían entrar a la habitación de mi abuela, no se que verían o que ambiente radiaba ese lugar, que las dos se abrazaron fuerte de mis piernas, mi madre cargo a una de ellas, mi padre a la más pequeña, ellos sabían el amor tan grande que le tengo ami abuela y en especial el que ella me tenía amí, al famoso y odiado por los demas primos "chaparrito", mi abuela ya no reconocia a nadie, ya no hablaba, pero el verme, todo mundo se sorprendió, me sonrió y estiró su mano para pedirme la mía, le bese su delgada mano, mi abuela estaba irreconocible, se encontraba acostada, en su cama se veia como estaba esperando la muerte, aquel roble que vi hace 25 años, ya se había secado, era un tronco seco, perdió movilidad de piernas, el habla, y gran parte de la vista, yo recuerdo que hace mas de un año ella me decia, que se queria morir, que dios se habia olvidado de ella, ya rebasaba los 100 años, no se cuantos exactos, todos creesmos que tiene 105, en fin, como no va estar asi despues de vivir tanto tiempo, yo con mis 30 años tengo enfermedades y achaques que ella, recuerdo que la ultima vez que la vi me dijo que ya tenia como 8 años que no le daba un refriado.

Después de que le estuve hablando un par de minutos, mis hijas por fin, le dieron un beso, que para no perder la costumbre, Marucia y Ana, se estaban pelando por no se que cosa, opte mejor por salirme con los ojos llenos de lagrimas, es algo que no le deseo vivir a nadie, despedirte de una persona que sabes que no vas a volver a ver mas que en fotos y hermosos recuerdos, es un dolor enorme haber visto reflejado en el rostro de mi abuela el de la muerte, pero una muerte de cansancio, la vida de mi abuela se esta apagando como una vela, cada segundo tiene menos vida, solo estamos esperando que fallezca, solo le pido a Dios que mande a la Santisima Muerte por ella cuando este dormida, el gran sueño de mi abuela.

TE VOY A EXTRAÑAR MAMA ROSARIO.